¡Al abordaje!
¡Botín a la vista, arrr!
Bueno, vale, no soy pirata, pero mis tatarabuelos lo fueron. Se dedicaban a calcinar, asaltar, saquear y robar tesoros felizmente. ¡Vivieron como auténticos bandidos de los mares! Por aquel entonces, sentaron cabeza aquí, en Barnacle Bay, cuando la isla era un destino para escapar de las autoridades, no del estrés de la vida cotidiana.
Aunque ya no es un lugar peligroso, Barnacle Bay es un enclave asombroso al que acude gente de todo tipo en busca de un rincón donde refugiarse. ¡Con sus preciosas playas, sus relajantes zonas de camping, sus frondosos parques y un moderno centro urbano, aquí hay opciones para todos!
Alucina: ¿has visto ese restaurante? ¡Es una embarcación que naufragó! ¿A que es una pasada? ¡Ja, ja!
¡Pásate de visita! A lo mejor descubres que quieres quedarte.